El
coronavirus se mueve con una gran rapidez. No se amedrenta ante los límites
geográficos y alza el vuelo de un país al otro y al sucesivo, de una persona a la
siguiente. Se mofa aprovechándose del contacto humano, del calor de un abrazo,
de la calidez de un acurrucarse. Incluso osa poner en tela de juicio el clásico
saludo o apretón de manos derechas -la preferida en las bendiciones
patriarcales (Gn 48.17-20)-.
Armándose de
paciencia COVID-19 se espera durante tres días en superficies de plástico y
acero pero no es bien recibido por el cobre dónde apenas dura cuatro
horas. Desplazándose vital por el aire
puede aguantar tres horas. Y una vez llega a nuestro organismo es raudo, por
rápido y por violento, ya que a las 24h de haber infectado una célula puede
generar hasta cien mil réplicas.
El ser
humano también está aprendiendo a moverse rápido. Mientras los investigadores
trabajan sin descanso para lograr la vacuna, los equipos sanitarios se movilizan
hasta el límite de la extenuación y el colectivo de la salud mental calentamos
motores...
Concretamente,
EMDR-España -liderada por Francisca García -presidenta- y Anabel González
-vicepresidenta- junto con EMDR-Europe con su presidenta Isabel Fernández -
organizaron ayer una jornada formativa online para todos sus miembros. Giada
Maslovaric, terapeuta del área de Milano, experta en EMDR y catástrofes, ya nos
había formado anteriormente acerca de las emergencias y las catástrofes en relación
al terremoto que asoló Italia en 2016 pero esta vez, gracias a la rapidez de
internet, entró en nuestras consultas, en nuestros
hogares a lo largo de las 7 horas de un sábado confinado de un marzo ya
primaveral, con la formación en formato de videoconferencia "Psicología de
emergencias y EMDR durante
el Coronavirus".
EMDR como
abordaje terapéutico para el TEPT basado en la evidencia se mueve una vez más a
nivel humanitario y los terapeutas estamos a disposición de las necesidades
actuales de nuestra sociedad ante el COVID-19. Si bien los enfermos
supervivientes del COVID-19 pueden presentar TEPT, no deberíamos olvidar que sus
familiares o su círculo próximo también puede estar en unas condiciones
parecidas. En lo que a la ciudadania confinada en sus lares se refiere, también
debe tenerse en cuenta la posibilidad de que se presenten señales como, entre
otras, trastornos del sueño, fatiga,
irritabilidad, adicción, angustia, impotencia, miedo... o en el caso de que se presente una patología previa,
ni que decir tiene el estado emocional que puede presentar la persona afectada
y su círculo próximo. Y lo cierto es que, una vez más ponemos el acento en el
colectivo sanitario y en la posibilidad de verse este afectado por Trauma
Vicario ya que a través del contacto profesional con la víctima, la persona que
está trabajando puede sufrir la transferencia del mismo trauma de forma secundaria
o indirecta.
EMDR sigue a buen ritmo a la hora de aconsejar a su red de terapeutas en relación
a como efectuar una terapia virtual de calidad, con garantías y confidencialidad.
Así que teniendo presente que en estos momentos nuestra población de pacientes se
halla si no ingresada o en su mayoría confinada se nos ha brindado formación y unas pautas óptimas de tratamiento en relación a EMDR y la terapia on-line.
Me permito
finalizar estas líneas con el cierre que Giada Maslovaric nos ofreció ayer, en
palabras de Séneca:
“Aunque el miedo siempre tenga más argumentos,
tú elige la esperanza”.
¡Salud!